El personal sanitario paraguayo ya ha comenzado a inocular a la población. |
Las autoridades de Asunción pidieron ayuda luego de que se confirmara un foco de la enfermedad, en su variedad selvática, en seis pacientes de la localidad de Laurelty, en el municipio de San Lorenzo, y el departamento de San Pedro.
El presidente Nicanor Duarte declaró un estado de emergencia de tres meses ante los temores de que se convierta en epidemia y llegue a las zonas urbanas.
Este sábado, llegaron 800.000 dosis de vacunas provenientes de Brasil, se esperan otras 144.000 de Perú y en los próximos días llegarán las prometidas por Venezuela.
El presidente Hugo Chávez se comprometió a donar unas 100.000 dosis.
Hasta la frontera
El personal sanitario paraguayo ya ha comenzado a inocular a la población. El ministerio de Salud junto con la Organización Panamericana de la Salud diseñan una estrategia para abarcar todas las áreas de riesgo.
El ministro Óscar Martínez anunció que la vacunación se extenderá a las poblaciones fronterizas con Argentina y Brasil.
La fiebre amarilla la provoca un virus que se transmite a través de la picadura de un mosquito, el aedes, el mismo que propaga el dengue.
A principio genera dolores de cabeza, musculares, fiebre, pérdida del apetito, vómitos e ictericia. Más tarde desencadena disfunciones en distintos órganos -como insuficiencia hepática o renal-, y hemorragias; y por último afecta el cerebro, provocando delirios, convulsiones, el estado de coma, y la muerte.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario