 El presidente Morales impulsa la realización del referéndum revocatorio. |
Los prefectos opositores de Bolivia decidieron este viernes someterse al referéndum revocatorio del 10 de agosto, junto al presidente Evo Morales y al vicepresidente Álvaro García Linera.
El prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, anunció la decisión luego de reunirse con su par de Beni, Ernesto de Suárez, y, según dijo, tras consultar con los otros prefectos opositores.
"Definitivamente vamos a ir a ese referéndum revocatorio de la imposición y el capricho del Presidente de la República por esa responsabilidad que tenemos con nuestros pueblos para que siga ganando la autonomía", dijo Costas en conferencia de prensa en Santa Cruz.
Cuatro regiones de Bolivia (Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando) realizaron entre el 4 de mayo y el 22 de junio, referendos para aprobar sus estatutos autonómicos.
Luego de esas consultas, los prefectos de esas cuatro regiones, además del opositor de Cochabamba, habían decidido rechazar el revocatorio y, en contrapartida, plantearon la renuncia de todos los prefectos, del Presidente y del Vicepresidente para convocar a elecciones generales, en las que ellos y Evo Morales ya no se postularían.
Campaña
Inmediatamente el gobierno inició una campaña en contra de los prefectos, a quienes acusó de ser "cobardes" por no aceptar el revocatorio pese a que fueron ellos mismos los que plantearon ese mecanismo como una salida a la crisis.
El prefecto de Beni, Ernesto Suárez, que acompañó a Costas en la conferencia de prensa, aseguró que en su región "no hay cobardes, no existen y ahora se lo vamos a demostrar".
Suárez dijo que si en algún momento los prefectos se opusieron a la consulta fue para presionar al Gobierno para que iniciara un proceso de diálogo, pero según su percepción, Evo Morales está más interesado en la confrontación que en el diálogo.
El presidente Morales impulsa la realización del referéndum revocatorio y, de hecho, ya inició la campaña para ser ratificado. Uno de los ejes de esa campaña es pedir el No a los prefectos.
Autonomía
Costas aseguró que los opositores decidieron aceptar el revocatorio para garantizar la autonomía por la que votaron los ciudadanos en sus regiones.
 La población padece la inflación, la emigración de ciudadanos y la escasez de gas natural. |
Y, aseguró que una vez ratificados, los prefectos podrán "llevar adelante su política y ejecutar los estatutos autonómicos".
Los opositores observan la fórmula que se aplicará en el referéndum revocatorio puesto que ésta establece que una autoridad será removida del cargo si obtuviera más votos que los logrados en la elección de 2005.
Eso ubicaría a Morales en ventaja frente a sus contendores porque para revocar al Mandatario se requerirá un porcentaje superior al 53,7 por ciento, mientras que para sacar a los prefectos sólo se necesitarán porcentajes por debajo del 47,8 por ciento, que es el porcentaje más alto obtenido por un prefecto.
Y, según la ley de convocatoria, será el propio Morales quien designe a los nuevos prefectos en caso de que éstos sean revocados de sus mandatos.
Tanto Costas como Suárez aseguraron que el revocatorio no resolverá la crisis del país y citaron entre los problemas urgentes, la inflación, la emigración de ciudadanos, además de la escasez de gas natural para abastecer los mercados de otros países.
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